CORONACIÓN DE CARLOMAGNO

 

El santo día de Navidad, sin saberlo nuestro señor Carlos, cuando se levantaba de la oración que acababa de hacer, antes de la misa, delante de la confesión de San Pedro, el Papa le impuso una corona sobre la cabeza, y fue aclamado por todo el pueblo romano: "A Carlos, Augusto, coronado por Dios, grande y pacífico emperador, vida y victoria".

 

Annales Maximiani, en: Grousset, R., Histoire Universelle, Encyclopédie de la Pléiade, 1957, Paris, t. II, p. 378. Trad. del francés por Héctor Herrera C.